Este ciclo de talleres fue íntegramente organizado por el Servicio Jesuita a Migrantes, en una iniciativa que se comenzó a gestar en enero. El proceso de planificación estuvo divido en desarrollar las metodologías, realizar un diagnóstico y en último lugar, la ejecución de la propuesta.
Por Tamara Zamorano
Este miércoles 17 de marzo se llevó a cabo el lanzamiento del ciclo de talleres Mujeres migrantes a cargo del Programa Comunitario del Servicio Jesuita a Migrantes, SJM Arica, los que se extenderán hasta el mes de junio y será realizada vía Zoom. Este espacio, que se originó a través del Proyecto de Apoyo Territorial (PAT) efectuado en el año 2020, tendrá como protagonistas a la comunidad de mujeres de esta ciudad nortina.
Makarena Salvatierra, Responsable Área de Intervención Social y del Programa Comunitario del SJM Arica, detalla: “Es una iniciativa que nace a partir del trabajo que realizamos el año pasado con las familias del PAT, donde en su gran mayoría trabajamos con mujeres. Cuando ese proyecto finalizó, no quisimos terminar ahí porque se generó una cohesión muy bonita con las participantes, por lo que les pedimos que nos respondieran una encuesta para saber cómo poder comenzar este año de trabajo con las familias”.
Como explica la Responsable del Programa Comunitario, “el taller está orientado a mujeres que tengan entre 25 a 45 años de edad, ya sean migrantes o chilenas, que hayan participado en el proyecto de Apoyo Territorial”. Además subraya que “sería ideal sumar a nuevas participantes, por lo que iremos viendo en el camino cómo va resultando el ciclo y si se puede replicar nuevamente para el segundo semestre”, asevera Salvatierra.
La convocatoria para este primer ciclo incluyó a 23 mujeres, pero se partió con solo 10 por lo que se espera que más se sumen.

Las metas del proyecto
Mujeres migrantes contiene tres elementos relevantes.“Éstos nacen del diagnóstico que ellas mismas contestaron y apuntan a compartir experiencias, potenciar habilidades y también con adquirir conocimiento sobre microemprendimiento. Lo que queremos con este ciclo de talleres es generar un espacio de encuentro y de diálogo para crear vínculos comunitarios”, precisa Makarena Salvatierra.
Sin embargo, los talleres tienen como objetivo desarrollar espacios de diálogo entre las mujeres, “principalmente para propiciar la generación de vínculos a nivel comunitario y el reconocimiento de sus virtudes. En lo específico, otro propósito que tiene es generar espacios grupales interculturales donde veamos elementos más interpersonales a nivel emocional”, comenta la experta.
Salvatierra afirma que “tendremos mensualmente dos espacios en los que estaremos acompañados de una voluntaria psicóloga para cuando existan espacios de desborde emocional, así podremos tener de parte de ella, orientaciones que nos permitan contener y acompañar”. Además agrega que la clave de estos encuentros es poder fomentar el vínculo entre las participantes, “porque hay muchas mujeres que solo tienen vínculo con sus familias y no conocen a otras mujeres. A partir de eso, las mujeres que participen del taller van a saber que van a tener dos veces al mes la posibilidad de compartir experiencias y generar nuevos vínculos”.
En cuanto a cómo se planificaron estos encuentros, la profesional explica que “se contemplan siete sesiones, se realizarán dos sesiones cada 15 días. Por lo que el cierre de este ciclo será en la quincena del mes de junio”.
La responsable del proyecto destaca que cuando se realizó el lanzamiento del ciclo de talleres Mujeres Migrantes “les mostramos la propuesta a las participantes y nos dijeron que les interesaba mucho, están muy entusiasmadas por empezar y poder compartir”.
En el evento en que se dio a conocer esta instancia estuvo presente el equipo del SJM de la oficina de Arica “estuvimos con Susana, pues somos las encargadas de este proyecto y nos acompañó la voluntaria psicóloga que estará en algunas sesiones del taller con nosotras y las participantes, para que las mujeres que son parte de Mujeres migrantes pudieran conocerla y comenzar a formar lazos”, finaliza Salvatierra.