El Servicio Jesuita a Migrantes convocó por segunda vez en el año a las organizaciones de la sociedad civil, en el marco del proceso de Cartagena +40, esta vez para conversar con respecto a integración.
La Declaración de Cartagena sobre los refugiados realizada en 1984, es uno de los instrumentos jurídicos más importantes en materia de protección y soluciones en América Latina y el Caribe, ya que contempla una definición ampliada de refugio. Por eso, cada diez años se realiza un espacio de reflexión para adaptar la coordinación de respuestas a la situación regional, proceso que este año es liderado por el Estado de Chile.
Constanza Castillo, abogada de seguimiento legislativo del SJM, contó que “invitamos a las organizaciones de la sociedad civil a participar en un segundo encuentro como instancias de diálogo, participación, debate, reflexión, ver avances y desafíos que puedan contribuir al proceso que está siendo liderado por el Estado de Chile”.
En la cita realizada en el Servicio Jesuita a Migrantes, Valeria Álvarez, asociada de Protección de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en Chile, destacó la importancia de estos encuentros y agradeció los espacios de coordinación en donde las organizaciones puedan exponer sus puntos de vista. “Para Acnur es relevante apoyar las instancias de participación de la sociedad civil en estos procesos como Cartagena +40, en donde muchas veces, las voces de las organizaciones pueden verse un poco diluidas por la cantidad de personas que están tratando de ayudar en estas instancias, entonces agradecemos todos estos espacios de coordinación”, comentó.
En esta segunda instancia participaron la Comunidad Afgana, Fundación Ronda, Amnistía Internacional, Infomigra, FASIC, Fundación Ann Pale Fanmi, Corporación Dolores Sopeña, ACNUR y la Organización de Colombianos Refugiados (OCORCH).
“Creo que la realidad actual amerita que las propias comunidades puedan sacar la voz y a la vez poder colaborar con los servicios estatales y privados para que podamos tener un buen desarrollo y poder llegar a un buen puerto todos juntos”, indicó Alí Akbarzada, representante de Fundación Ronda y de la comunidad afgana en Chile.
“Vinimos a hablar sobre cómo se está aplicando la Declaración de Cartagena y cómo afecta a la vida de las personas necesitadas de protección”, agregó María Elena Osorio, integrante de la Organización de Colombianos Refugiados en Chile.
Cabe señalar que desde diciembre de 2023, Chile asumió el liderazgo del proceso, el que está siendo acompañado por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados. Según señala el Ministerio de Relaciones Exteriores, en la Declaración y Plan de Acción 2024 – 2034, dicho proceso tendrá como base los consensos, avances y logros de la región en la última década y dará continuidad al Plan de Acción de Brasil, manteniendo la vigencia de sus herramientas y buenas prácticas, velando por refrozarlas, ampliarlas y regionalizarlas en América Latina y el Caribe.
Los ejes temáticos para la discusión y elaboración de la Declaración Política y Plan de Acción de Chile son; protección de las personas en situación de movilidad humana y apátridas, estrategias para soluciones solidarias, protección en contextos de desplazamientos forzados por desastres.
