CRISIS. Durante 2019 no se registraba ningún caso. De acuerdo a cifras de la DPR en lo que va del 2022 se contabilizan 2 personas detenidas y 27 víctimas.

La expansión del “Tren de Aragua”, una banda criminal venezolana que se ha extendido por la costa del Pacífico, ha vuelto a posicionar con fuerza el tráfico de migrantes en medio de la diáspora proveniente de Venezuela. Un tipo de delito con el que esta organización financiaría sus operaciones, a través de la explotación sexual de sus víctimas, según han determinado algunas indagatorias sobre el violento actuar de esta organización.
Como muestra del fuerte alza del tráfico de migrantes, si en 2019 (en período prepandemia) Carabineros registraba 10 casos por tráfico de extranjeros en el país, con seis detenidos, durante 2021 estos escalaron a 147 casos con 85 detenciones. Mientras que este año, hasta abril pasado Carabineros contabilizaba 72 nuevos casos con 18 detenidos.
Bajo la misma tendencia de crecimiento paulatino, de acuerdo a registros de Carabineros en la Región de Antofagasta durante 2019 no se reportaba ningún caso de tráfico de migrantes. No obstante, según reportes actualizados de la Delegación Presidencial Regional (DPR) de Antofagasta, en 2021 se registró un total de 39 detenidos y 277 víctimas afectadas por este delito.
El capitán Sebastián Soto Muñoz, jefe del OS9 en Antofagasta, precisa que en el delito de tráfico de migrantes operan bandas internacionales. “Estos son sujetos, a los que se les puede llamar captadores de personas, que pueden encontrarse en una situación de vulnerabilidad. Mediante el engaño les ofrecen a las víctimas mejores condiciones de vida en Chile. Debido a eso, a partir del año pasado y el actual se ha sabido de muchos casos similares, principalmente de venezolanos que llegan a nuestro país”, afirma.
“Este proceso, desde que salen del país de origen hasta llegar a nuestras fronteras, tiene un valor aproximado de mil dólares. Los captadores ingresan a las personas, generalmente por pasos no habilitados (…) En ese valor de mil dólares y fracción, también se incluye el pago a los famosos ‘coyotes’, quienes se encargan de guiara estas personas hasta ingresar a Chile por pasos clandestinos. Ellos les señalan por dónde deben caminar y esconden a las personas cuando hay un control policial”, agrega.
Según la DPR, en lo que va del actual año la entidad reporta dos detenidos y 27 víctimas afectadas por tráfico de migrantes. “En relación a la forma que se ha combatido esta problemática, Carabineros en la actualidad se mantiene trabajando con apoyo de las fuerzas Armadas a través del Decreto Supremo N° 265 vigente, el cual genera el apoyo logístico y de recurso humano de las FF.AA, para ir en apoyo contra el tráfico de migrantes y otros delitos, en un plan denominado frontera segura que abarca toda la macro zona norte fronteriza”, informaron desde la DPR.
“Como institución mantenemos un despliegue en frontera de efectivos policiales acompañados de medios logísticos y vehículos terrestre”, agregaron desde esta entidad. Según datos de la DPR, aportados por la Policía de Investigaciones (PDI), uno de los procedimientos el año pasado por el delito de tráfico de migrantes registra el caso de un imputado boliviano, quien transportó desde Bolivia hasta territorio nacional por pasos no habilitados a ocho víctimas.
RIESGOS
Según análisis del Servicio jesuita a Migrantes (SJM) el incremento en las medidas de control en la zona fronteriza de Tacna y Arica ha obligado a las personas migrantes a buscar nuevas rutas de ingreso al país.
“Las alternativas se fueron haciendo conocidas, y como una consecuencia imposible de evitar, comenzó a desarrollarse toda una infraestructura que posibilita el viaje desde Perú, pasando por la frontera con Bolivia en Desaguadero, luego Oruro, Colchane, Huara e Iquique. Así, existe actualmente toda una oferta de transporte en buses, convis, taxis y camiones que recogen a estos grupos de personas y los dejan en puntos específicos, eludiendo los escasos controles policiales”, dice el SJM.
“Es frecuente que no se cumpla lo acordado y los transportistas los abandonen en distintos puntos del desierto, obligándolos a caminar durante horas y bajo condiciones extremadamente difíciles. Hay que recordar, además, que Colchane está a 4.000 mts de altura con altísimos niveles de sequedad y temperaturas que oscilan en estos meses entre los 0° y 18°”, agrega uno de los estudios de SJM.
Según el capitán Soto Muñoz, las víctimas de tráfico de migrantes enfrentan constantes riesgos en las rutas. “El norte, especialmente en las noches registra un clima extremo, que pueden causar la muerte a algunas de estas personas, en el caso de que no estén con las condiciones físicas óptimas para enfrentar estos trayectos”, detalla Muñoz.
Fuente: El Mercurio de Antofagasta.