Las actividades incluyeron la entrega de 10 tablets a familias migrantes que participan del proyecto Niñez Migrante Protegida.
El equipo del Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) de la región de Tarapacá, junto a, Francisco Carreño, Jefe Social Nacional, desarrollaron un conjunto de importantes acciones en la frontera, el campamento transitorio para personas migrantes de Lobitos (Iquique) y con los niños que integran el proyecto “Niñez migrante protegida” de Subsecretaría de la Niñez.

El 5 de abril se realizó una visita de monitoreo a la localidad de Colchane y al sector fronterizo donde se encuentra habilitado el albergue transitorio. “Durante la visita recorrimos el albergue transitorio y el Centro de Acogida de Hogar de Cristo donde pudimos hablar con las personas migrantes y profesionales que trabajan en el lugar para conocer las dinámicas de ingreso y permanencia. Además, recorrimos la zona de los bofedales para monitorear los ingresos y resguardo a la frontera”, explica la responsable de SJM Tarapacá, Pilar Valencia.
Con la misma intención de conocer el funcionamiento del espacio y la situación de las personas migrantes que allí habitan y levantar sus principales necesidades, SJM Tarapacá acudió al Campamento transitorio ubicado en el Campus Lobitos. Valencia precisa que “conversamos con la encargada de la productora, indagamos respecto a los perfiles de atención, la dinámica interna de quienes habitan el espacio, las coordinaciones y valoramos la organización que las propias personas migrantes han tomado para mantener y hermosear el lugar. Sigue siendo preocupante, la situación de NNA respecto a resguardar el interés superior de cada uno y una. La responsable del campamento, nos mencionó que actualmente la principal urgencia que se ha manifestado es la información, ya que hay desconocimiento sobre acceso a derechos e información migratoria, por lo que esperamos replicar operativos informativos y sociales”
Por último, se entregaron tablets a diez familias migrantes que fueron partícipes del proyecto de la Subsecretaría de la Niñez, que busca contribuir a la superación de la pobreza, por medio de la atención de las necesidades urgentes las niñas, niños migrantes y sus familias, que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad. “La iniciativa favoreció a un aproximado de 20 adultos y 40 niños. Las familias se mostraron muy agradecidas por la entrega ya que es un gran apoyo para sus hijos/as en el proceso educativo”, agrega Pilar Valencia.
Trabajo de primera línea
A su turno, Francisco Carreño, Jefe Social de SJM sintetizó la experiencia señalando que “caminar, estar al lado, esperanzar la vida, consolar, alegrarnos juntos y juntas, así podría resumir estos días que viví como parte del equipo del SJM Tarapacá. Estar en primera línea y salir de zonas seguras o de comodidad para encontrarse con las personas y familias migrantes más vulneradas es un sello de este equipo, que se manifiesta en la ciudad, en la frontera, en la sede y campamentos. No podemos acoger a miles, pero en las acciones donde estamos, vamos a realizar un trabajo de excelencia para acoger a los niños y niñas, mujeres y hombres participantes de nuestros proyectos. Quiero destacar con especial gratitud y admiración por el trabajo que realizan: Camila, Javiera, Camila, Pilar, Franco, Rodrigo, Benjamín”.
